Día del padre

Día del padre
Los juegos de cachorros que tienen los papás con sus niños y su tono de voz son muy distintos a los de una mamá, y esto tiene consecuencias en el desarrollo cerebral de sus hijos.

Por Carolina Pérez Stephens
Educadora de párvulos UC, Master en educación Harvard University, Directora de Helsby International Preschool, Profesora U. de los Andes.





Mayo y junio son meses especiales, ya que en Chile se celebra a las mamás y a los papás. En muchos colegios y jardines se hacen fiestas, desayunos, los niños cantan y les regalan alguna tarjeta o algo creado por ellos. A veces los abuelos y abuelas cumplen este rol, ya que los padres no están o bien uno de los padres cumple el rol doble de papá y mamá.

Hoy los estudios han demostrado lo que por siglos siempre se ha sabido: los niños y niñas NECESITAN figuras adultas de apego, ya que sólo así se va a desarrollar bien su cerebro y sus emociones. No da lo mismo quien abraza, consuela, acaricia o hace dormir.

El sueño de una guagua no es igual si es en el pecho de su madre, con un cojín en la pieza o en una sala cuna. Con el primer ejemplo su corazón y metabolismo van a estar en sincronía con la madre, con el segundo y tercer ejemplo la guagua se va a despertar varias veces, va a llorar y su sueño va a ser intranquilo y poco reparador.

¡¡Y el rol del papá también es importante!! Los juegos de cachorros que tienen los papás con sus niños y su tono de voz son muy distintos a los de la mamá y esto tiene consecuencias en el desarrollo cerebral de sus hijos. Son otros los circuitos que se conectan.

¿Y qué pasa cuando un niño está enfermo? En medio de un cuadro de fiebre su cerebro y cráneo en crecimiento se ponen en pausa. Así de simple. Pero se va a mejorar mucho mas rápido si tiene a sus padres cerca. ¿Por qué? Porque el sistema inmunológico es muy sensible a las emociones, sean positivas o negativas.

Si un niño ríe, automáticamente aumentan las células T (glóbulos blancos) que dan la pelea contra infecciones, virus, bacterias, etc. Si el niño ríe baja el cortisol, que es la hormona del estrés, si el niño ríe aumenta el gamma inteferon, otro guerrero que combate las enfermedades.

En el Día del Padre quiero dedicar esta columna a todos los padres que tienen niños enfermos de cáncer y que QUIEREN CUIDAR A SUS HIJOS pero que no pueden hacerlo por la falta de una licencia especial que se los permita. Mi corazón, pensamiento y energías positivas para todos aquellos padres que están sin licencia para cuidar.

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